El Podcast
Las cosas cotidianas van cobrando sentido y valor a medida
que se comparten y que forman parte de las historias que se entrelazan. Hoy más
temprano estaba preparándome un sándwich mojado (una de las tantas recetas que
aprendí en mi curso de cocina) y me puse a recordar las noches de los últimos
18 meses, cuando mi rutina era preparar cena para dos. A veces era muy cansado
porque era el corolario de jornadas agotadoras, pero los minutos que venían
cuando nos sentábamos a la mesa y nos veíamos comer eran poéticos. Ahora, a la
distancia me doy cuenta de que esos segundos eran trascendentes. En muchas
ocasiones he afirmado que la vida está compuesta por instantes y esos recuerdos
lo confirman. Ayer mi hermano estuvo desaparecido por varias horas, y estuve
muy angustiado, pensé lo peor. Y mientras el reloj caminaba lentamente, recordé
las veces que le cambiaba pañales cuando era pequeñito, y aquellas ocasiones en
las que salíamos a mojarnos con mi mamá cuando llovía muy recio. Ayer me di
cuenta de cuánto amo a mi hermano. Los momentos te hacen crecer. Mientras estás
viviéndolos no dimensionas lo importante que cada minuto es. Generalmente es
hasta que han pasado que los valoras. Estoy en un proceso de duelo por la
ruptura de una relación sentimental. Yo extraño esos momentos y estoy seguro
que esa nostalgia no es compartida por quien me abandonó. Sin embargo, no
guardo rencor, a pesar de las palabras hirientes y las acusaciones sin
fundamento. Todas las noches oro a Dios pidiendo protección por quien me regaló
dos años intensos. Dos años que persistirán en mi memoria como tiempo valioso.
Desde joven he creído que cuando das amor nunca salís perdiendo, porque si sos
correspondido es extraordinario, pero si no es así al menos crecés en ese sentimiento que hace
que valga la pena vivir. Hoy estoy frente a una hoja en blanco que ya tiene
muchas letras, y las imágenes de aquellas noches cuando cenábamos no dejan de
pasar por mi cabeza como una película sin final. El ruido de la lluvia se
encarga de agregarle más nostalgia a la noche. Estoy seguro de algo: Esos
instantes me hicieron feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario